20 ene. 2025

Nole Djokovic pone fin a la novela

Novak Djokovic partió ayer de Australia después de que la justicia rechazara su recurso contra su deportación ordenada por el gobierno, que consideró que el número uno mundial del tenis representaba un “riesgo para la salud” por no haberse vacunado contra el Covid-19.

La decisión, tomada por unanimidad por los tres jueces del tribunal, echó por tierra definitivamente las esperanzas del serbio de 34 años de ganar su 21º título de Grand Slam, un récord, en el Abierto de Australia, que comienza hoy.

“Estoy muy decepcionado”, dijo Djokovic en un comunicado. “Respeto la decisión del tribunal y cooperaré con las autoridades pertinentes en relación con mi salida del país”, añadió poco antes de abandonar Melbourne a las 22:51 locales (11:51 GMT), según constató una periodista de la AFP presente en el interior del avión.

“Ahora voy a tomarme un tiempo para descansar y recuperarme”, dijo el jugador, cuya carrera podría verse gravemente afectada tras el fallo.

Djokovic obtuvo permiso para salir del centro de detención en el que fue internado el sábado y vio la audiencia de cuatro horas por internet desde las oficinas de sus abogados en Melbourne.

En sus conclusiones ante el tribunal el sábado, el Ministro de Inmigración Alex Hawke había argumentado que la presencia de Djokovic en el país era “probablemente un riesgo para la salud”.

Dijo que fomentaba el “sentimiento antivacunas” y podría disuadir a los australianos de recibir vacunas de refuerzo a medida que la variante ómicron se extiende rápidamente por el país.

La presencia del campeón en Australia podría incluso “provocar un aumento de los disturbios civiles”, añadió el ministro. Aunque calificó de “insignificante” el riesgo de que el propio Djokovic infecte a los australianos, el ministro dijo que su “desprecio” de las normas sanitarias contra el Covid-19 constituía un mal ejemplo.

En el plano deportivo, la competencia arranca hoy, siendo candidatos en masculino: El español Rafa Nadal, el ruso Daniil Medvedev, el alemán Alexander Zverev y el griego Stéfano Tsitsipas.


El serbio fue deportado de Australia por ser un “riesgo para la salud”.