Hace unos tres días había dicho que no sentía los movimientos de su bebé. Su embarazo ya llevaba 38 semanas y media y esperaba una niña. A causa de esta situación, Diana Báez (33) volvió para sus controles prenatales en el Hospital San Pablo de Asunción.
“Le decían que estaba todo bien, que coma algo dulce nomás para que se mueva. Le enviaron de vuelta a su casa”; sin embargo, ayer por la mañana acudió de nuevo al centro médico porque seguía sin percibir los movimientos de su bebé y recibió la peor de las noticias, relató Gustavo Báez, hermano de la joven madre.
Al realizarse el control, ya no escucharon los latidos del bebé, aparentemente estaba muerto. En la tarde de ayer, la joven entró a quirófano para realizarse la cesárea para extraer el cuerpo de la niña.
Gustavo contó que a ellos solo se les acercó un médico, diciéndoles que la muerte súbita afecta al 30% de los no nacidos. La duda quedó en los familiares que sospechan de una negligencia médica.
Averiguación. La Dra. Amada Rodríguez, directora médica del San Pablo, dijo a ÚH que están realizando la investigación correspondiente. Adelantó que para el lunes se tendría un panorama más claro.