El comediante argentino, que brilló en el cine, la televisión y el teatro, falleció ayer a los 83 años. El artista estaba internado en una clínica de rehabilitación desde julio, pero su cuadro se fue complicando y tuvo que ser ingresado en una sala de terapia intensiva, donde se encontraba en coma farmacológico desde el domingo. El actor en los últimos meses estaba afrontando varios problemas de salud derivados de una insuficiencia renal.
“En julio, el actor había sido dado de alta, luego de permanecer 11 días internado por una importante inflamación en los tobillos originada por un diagnóstico de celulitis, pero desde entonces su situación fue muy vulnerable y necesitó de cuidados especiales”, refirió el diario argentino La Nación.
El medio de prensa agrega que Bal estuvo viviendo unos meses en la casa de su ex esposa, Carmen Barbieri, con quien tuvo un hijo, el también artista Federico Bal.