La propiedad se encuentra a orillas del río Aquidabán, de donde obtendrá el agua que necesita para la faena de bovinos y a unos 10 kilómetros de la ruta principal.
La Asociación Paraguaya de Productores y Exportadores de Carne (Appec), que realizó los primeros contactos con la multinacional para atraerla a territorio paraguayo, informó sobre la compra de las tierras y las intenciones de que la construcción empiece entre enero y febrero del 2022.
La industria invertirá como mínimo USD 50 millones en la primera etapa, con miras a faenar diariamente aproximadamente 1.200 cabezas. La planta se perfila a tener instalaciones tan o más innovadoras que Belén, perteneciente a Athena Foods, que también es una multinacional. Se estima que el frigorífico operará entre finales del 2022 e inicios del 2023.