04 ago. 2025

Mal año para el hijo de Zeus

La mitología e historia griega no dejan hasta hoy de ser fuente de inspiración para el cine. La lista de producciones con tal temática es bastante rica últimamente.

Foto: UH Edicion Impresa

Foto: UH Edicion Impresa

Por Sergio Cáceres Mercado | caceres.sergio@gmail.com

En el caso de Hércules, con pocos meses de diferencia volvemos a tener un estreno con el famoso héroe como protagonista. Pero una diferencia sustancial: aquella protagonizada por Kellan Lutz, Hércules. El origen de la leyenda, se centraba en lo que narra el mito, es decir, se lo presentaba como el semidiós hijo de Zeus; sin embargo, esta que ahora tenemos en cartelera y protagonizada por Dwayne Johnson, muestra a un personaje que usa el nombre de Hércules y se aprovecha de su fama para hacerse pasar por él.

Parte de la historia consiste en desmitificar la figura de los héroes griegos y otras leyendas parecidas. Entre las muchas aventuras de este Hércules humano, se van dando situaciones que ponen en duda las creencias religiosas y otras supersticiones que cree la gente. Tenemos así a un Hércules que no es ayudado por ningún Dios, es más, ninguna deidad aparece nunca, por lo que podemos calificar la película como totalmente laica, y esto no es un exageramiento porque hay escenas donde se destruyen estatuas con un claro mensaje antisupersticioso. Esto último sin duda proviene de la novela gráfica en la cual está basada.

Hay una trama que pretende revelarse poco a poco, sin embargo fracasa estrepitosamente porque de entrada se adivina por donde irá la cosa. Esto le saca buena parte del entretenimiento, y lo que nos resta entonces es ver el despliegue físico de Hércules y sus amigos. El director Brett Ranner no ha estado en su mejor forma para esta realización, aunque son destacables más de un actor experimentado, tal es el caso de Ian McShane.

Esta nueva historia de Hércules otra vez se queda por el camino, por lo que podemos afirmar que no es definitivamente el año del hijo de Zeus.