“Nos encontramos ante una situación compleja y de mucha incertidumbre ante la evolución de la pandemia del Covid-19, que ha impactado en la salud y vida de las personas a nivel mundial (...) Sentimos mucho comunicar que ante estas medidas y luego de un considerable análisis, nos vemos obligados a cerrar nuestras puertas definitivamente”, reza el comunicado difundido por el Grupo Byspania.
Jesús Serrano, gerente de la empresa, indicó que ante los altos costos de mantenimiento y sin la posibilidad de generar ganancia alguna, se vieron obligados a indemnizar a sus 48 empleados y a distribuir entre los mismos los insumos almacenados para la preparación de sus platos, a fin de que no se pierdan.
Serrano indicó que durante este tiempo de cuarentena se plantearían introducir innovaciones y cambios en la infraestructura del restaurante, que ya eran necesarios después de tres años de funcionamiento.
Dijo que los empleados cesados tienen la promesa de que volverán a ser contratados una vez de que el restaurante reabra sus puertas, tras la culminación de la cuarentena.