La pandemia del coronavirus (Covid-19) pone a prueba cada día al Laboratorio Central del Ministerio de Salud Pública (MSP), que ante el ingreso del virus obligó al sistema a capacitar sobre la marcha a otros profesionales y trabajar durante 24 horas.
El rol del laboratorio permite que una detección oportuna de los casos y sus contactos proporcione información relevante para la toma de decisiones, “que permitieron obtener resultados exitosos en la mitigación y el control de la transmisión”, sostiene la doctora Carolina Aquino, directora del Laboratorio Central.
“Actualmente, estamos detectando varios positivos en la comunidad y en contactos. De esta manera la identificación oportuna constituye el aporte más valioso del laboratorio para guiar las acciones precisas de respuesta ante la pandemia por el Covid-19”.
Al principio, el centro público solo tenía capacidad para 100 muestras, que debía extenderse a 1.000 por día, por eso se habilitaron otros laboratorios, nueve en total, que permiten llegar a la meta. Además, se logró ampliar la capacidad en número de testeos mediante la contratación de más recursos humanos, que trabajan en tres turnos, y la adquisición de reactivos para satisfacer el aumento de la demanda de diagnóstico.
Los primeros casos positivos fueron detectados en viajeros y después se sumaron los comunitarios. Actualmente, los connacionales que provienen de Brasil tienen carga viral elevada, lo que significaría un contagio más fácil. “Mide el número de partículas virales o de copias de genoma en un fluido biológico. La técnica realizada actualmente es cualitativa, no cuantitativa; por lo tanto, no tenemos datos exactos de carga viral”, señaló.
TEST COVID
El estudio consiste en una técnica molecular que detecta el material genético del virus en muestras respiratorias; es decir, el ARN del SARS-CoV-2. La prueba se denomina RT-PCR, mediante la cual se amplifica el material genético viral para hacerlo detectable por un equipo que mide la fluorescencia emitida a medida que se produce la amplificación. En la actualidad es la técnica de referencia y de elección para el diagnóstico del coronavirus.
Las muestras más utilizadas para el diagnóstico de Covid-19 son hisopados nasales y faríngeos y en pacientes internados y graves se utilizan muestras de aspirados o lavados bronquioalveolares.
“Aunque es un trabajo bajo tensión por la naturaleza de las actividades, el personal del laboratorio está altamente entrenado y posee experiencia para manipular este tipo de patógenos”, dijo la doctora Carolina Aquino, con relación a si los funcionarios trabajan bajo estrés ante el miedo del contagio.
Es una metodología compleja que requiere de varias etapas. Por ello, los resultados se entregan en un plazo mínimo de 48 horas, que se necesita para la manipulación de un gran número de muestras de alto riesgo biológico, y la realización de técnicas moleculares artesanales muy laboriosas.
El laboratorio divide el trabajo en tres etapas
Para el diagnóstico, se divide en 3 etapas el trabajo. La primera es la preanalítica, que incluye la recepción y verificación de las muestras, además del ingreso de los datos del paciente en el sistema informático del laboratorio. La etapa analítica requiere la inactivación previa de las muestras en el Laboratorio de Bioseguridad de Nivel 3, para luego ser transportadas al Departamento de Virología, donde se realiza la extracción de ARN y, finalmente, la RT-PCR en tiempo real. Y la etapa posanalítica, en la cual se realizan la verificación, análisis e interpretación de los resultados, para luego elaborar los informes que serán remitidos a las autoridades sanitarias, explicó la doctora Carolina Aquino, del Laboratorio Central.