Un 50% de los brasileños creen que existe la posibilidad de que el presidente del país, el ultraderechista Jair Bolsonaro, intente dar un golpe de Estado, según un sondeo divulgado el sábado.
La encuesta, elaborada por el Instituto Datafolha, llega después de semanas de tensión institucional entre el mandatario y los poderes Legislativo y Judicial, que le ha incluido en varias investigaciones por asuntos diversos, entre ellos la difusión de noticias falsas y antidemocráticas. Según el sondeo, un 30% de los brasileños cree que hay “muchas posibilidades” de que el jefe de Estado, Jair Bolsonaro, quebrante el actual régimen democrático, mientras que un 20% estima que es posible ese escenario, pero “poco probable”.
Por el contrario, un 45% de los encuestados consideran que “no hay ninguna posibilidad” de que el mandatario lidere un golpe.
Asimismo, un 51% teme el regreso de la dictadura a Brasil, como ya ocurrió con los militares entre 1964 y 1985. Ese porcentaje es el más alto desde que el Instituto Datafolha empezó a preguntar por esa cuestión, en febrero del 2014.
Si bien, un 70% defiende que la democracia es el mejor sistema para el país, la segunda marca más alta desde el inicio de la serie histórica, en 1989; mientras que el apoyo a un régimen dictatorial cayó a su nivel más bajo con 9%.
Los resultados de la encuesta son fruto de 3.667 entrevistas a personas de más de 16 años realizadas entre los días 13 y 15 de setiembre, en 190 municipios del país. El margen de error es de dos puntos.
El presidente Bolsonaro encabezó el pasado 7 de setiembre, Día de la Independencia de Brasil, una jornada nacional de protestas tildadas de antidemocráticas, en las que amenazó con “poner firme” a la Corte Suprema y no cumplir sus sentencias.
El pulso entre Bolsonaro y el Supremo viene de largo y empezó a agravarse a partir del año pasado. El gobernante es investigado en el marco de un proceso que ya ha llevado a la cárcel a numerosos activistas de ultraderecha por la diseminación de noticias falsas y ataques a las instituciones del país. EFE