El ex presidente del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) Justo Pastor Cárdenas Nunes impugnó ante la Corte Suprema la resolución de la Fiscalía General que había confirmado a la fiscala anticorrupción Natalia Fúster para proseguir en la causa por los hechos punibles de enriquecimiento ilícito y lavado de dinero.
De esta forma, la competencia de la representante del Ministerio Público deberá ser definida por la Sala Penal de la máxima instancia judicial.
Fúster había sido recusada por Cárdenas por enemistad manifiesta.
Entre los motivos detallados y mencionados en el documento, hablan de que Fúster omitió maliciosamente la disposición de sometimiento de la defensa al proceso, falta de análisis y desconocimiento de la documentación oficial y que no consideró la solicitud de la defensa para realizar la pericia.
Imputación. El 23 de noviembre del año pasado se presentó la imputación por los hechos punibles mencionados, por no poder justificar G. 2.644.701.082. Además se ordenó su detención y se pidió la prisión preventiva.
Asimismo, fueron procesados por lavado de dinero los hijos del ex titular del Indert, Justo Cárdenas Pappalardo, María Alexandra Cárdenas Pappalardo y Allan Cárdenas Rodríguez, para quienes se solicitó medidas alternativas.
Según el escrito, Cárdenas aparentemente ha tenido egresos que superan a los ingresos considerando no solo los de la función pública sino también en la parte privada. El mismo constituyó firmas y compró vehículos.
Entre julio de 2008 y julio de 2018 el ex colaborador de Horacio Cartes tuvo un ingreso de G. 5.364.894.000 y un egreso de G. 8.009.595.082. Lo que da la diferencia sin justificación legal de G. 2.644.701.082.
Cárdenas está recluido en una celda vip del penal de Tacumbú, que anteriormente fue ocupada por el narco brasileño Jarvis Chimenes Pavão. Fuentes penitenciarias afirman que se debe pagar entre USD 5.000 y 10.000, y una mensualidad de G. 1 millón.