No obstante, poco decisiva fue la participación del argentino Lionel Messi en su primer partido después del conflicto con la dirigencia tras anunciar su intención de marcharse de la institución y su posterior cambio de parecer para evitar ir a juicio con “el club de su vida”.
El capitán del cuadro catalán no llegó con peligro al área rival y su acción más destacada fue cederle el lanzamiento de un penal al francés Griezmann.
Por otra parte, no fueron convocados para el partido ni Luis Suárez ni Arturo Vidal, con los que no cuenta el DT.
Tampoco se alistaron Pjanic y Todibo, quienes ayer realizaron su primer entrenamiento después de superar el coronavirus, ni tampoco Ter Stegen y Umtiti, lesionados. El Barcelona seguirá poniéndose a punto el miércoles, en el estadio Johan Cruyff, ante el Girona.