La Junta Municipal de Katuete, Departamento de Canindeyú, rechazó la rendición de cuentas del año 2020, que presentó el intendente Julio Brítez. Ocho concejales optaron por rechazar el balance, mientras solo tres votaron por la aprobación. También hubo una abstención.
Para rechazar, los ediles citaron varias irregularidades, entre ellas, el supuesto pago con dinero municipal de G. 228 millones en honorarios a abogados en un litigio judicial que enfrenta Brítez, por un caso del software adulterado y vendido a otros municipios.
“Esto lo había realizado con el dinero del contribuyente para no ir a juicio oral y público y terminar preso por los delitos cometidos”, señaló el concejal opositor, Roberto Ocampos. Otro punto que se cuestiona es el supuesto uso irregular de combustibles, ya que según las denuncias, el intendente “acomodó millonarios pagos en las planillas”.
Un ejemplo que se citó es que supuestamente Brítez hace figurar que una motoniveladora trabajó durante tres días para hacer perfilado de dos cuadras de empedrado, para lo que utilizó más de 320 litros de combustible, cuando en realidad, los colonos son quienes reparan los caminos y la motoniveladora se utiliza escasamente. Para dicha obra, mencionan que se gastó G. 14 millones.
También se citó la adjudicación de obras a una misma empresa con varias adendas de por medio, con trabajos denunciados por mala calidad. Ante la falta de documentaciones no se pudo investigar a profundidad la ejecución de obras.
En el documento de rechazo se mencionó que hay una selectividad en el cobro de impuestos, ya que a algunos ciudadanos se les cobra y a otros no.
Los concejales señalaron que enviarán un informe a la Contraloría General de la República sobre el rechazo del balance del intendente quien fue electo por el Unace pero actualmente responde al cartismo.