Eva Aquino, tía del menor, denunció el caso a ÚH este martes, informó la corresponsal Vanessa Rodríguez.
Dijo que su sobrino fue a visitar a su abuela en la Compañía San Felipe de la ciudad de Santiago, en el departamento de Misiones; sin embargo, ya no regresó de allí.
La desaparición se produjo el domingo en horas de la noche, pero el lunes por la mañana fue encontrado, después de que el mismo haya dado sus coordenadas a sus familiares por celular.
Lo raro del caso es que, cuando los vecinos del lugar lo hallaron, el adolescente estaba atado del cuello con su pantalón vaquero, y los brazos sujetos con su remera a un árbol de eucalipto, a 6 metros de altura. Su celular estaba tirado a varios metros de él.
Nadie se explica cómo llegó a parar allí y él alega no saber qué ocurrió. Para bajarlo, tuvieron que ayudar 10 hombres. El cuerpo del chico tenía rasguños en sus brazos, piernas y abdomen.
Esta no es la primera vez que al joven le ocurre algo similar. Sus familiares comentaron que el año pasado, en circunstancias igual de extrañas, resultó con varios golpes luego de estar encerrado en el baño de su vivienda.