Las municipalidades de Nueva Esperanza y de Santa Fe del Paraná también obtuvieron contratos de comodato con la Itaipú para poder utilizar como puerto partes de la franja de bosques de protección del embalse de la represa binacional.
Las características de estos embarcaderos son que se encuentran en medio de los montes de la binacional que dan al río Paraná (lago Itaipú) y con ingreso desde los cultivos mecanizados.
Como mostró ÚH, la Itaipú cedió áreas portuarias de estas características a la Administración Nacional de Navegación y Puertos (ANNP), también en el distrito de Nueva Esperanza y en San Alberto, pero la administración de la ANNP desconoce dónde están y qué sucede allí, por lo que se ordenó una investigación al respecto, considerando que es una zona donde abundan los puertos clandestinos que trafican ilícitamente drogas, cigarrillos, armas, etcétera.
NUEVA ESPERANZA. Según los documentos entregados por la Itaipú al Congreso, en el año 2015, los entonces directores de la Itaipú Binacional James Spalding (Paraguay) y Jorge Samek (Brasil), firmaron dos contratos de comodato con la Municipalidad de Nueva Esperanza, donde ceden parte de la poligonal envolvente, área de bosques que protegen de los sedimentos las aguas del embalse para garantizar la vida útil de la represa.
El primer contrato fue firmado en mayo del año 2015 y el segundo en noviembre, por los directores citados y el intendente Benito Ricardo Aguayo Fernández. Ambos son por cinco años y las dimensiones de las áreas a ser utilizadas son de 4.479 metros cuadrados y otra de cuatro hectáreas.
SANTA FE DEL PARANÁ. El mismo año, 2015, el intendente de Santa Fe del Paraná Joaquim Lopes Matheus también firmó en mayo un contrato de comodato con los citados directores de Itaipú para la utilización de un área de 2.831 metros cuadrados dentro de la franja de protección del embalse.
El contrato firmado por la binacional con dicha Comuna también es por cinco años, o sea, vence el año próximo, pero con la posibilidad de ser prorrogado por el mismo periodo.
LOS NARCOSOJALES DE ITAIPÚ: NEGOCIADO Y DESTIERRO BINACIONAL (LXXXVII)