05 nov. 2025

Incendios en EEUU crecen en plena búsqueda de víctimas

Búsqueda. Forenses remueven los escombros para ver si hallan cuerpos tras incendios.

Búsqueda. Forenses remueven los escombros para ver si hallan cuerpos tras incendios.

Los dos gigantescos incendios que se registran desde el jueves en California y que se cobraron la vida de por lo menos 44 personas siguieron creciendo ayer, mientras que los equipos de emergencia mantienen la búsqueda de unas 200 personas que siguen desaparecidas.

El incendio “Camp Fire” es ya el más mortífero de la historia del estado, al ocasionar la muerte de al menos 42 personas, y también el más destructivo, puesto que arrasó más de 6.700 edificios, en su mayoría de la población de Paradise, de 26.000 habitantes, que las llamas engulleron por completo.

Pese a los esfuerzos de los más de 5.000 bomberos que, según los datos del Departamento Forestal y de Protección contra Incendios del estado, Calfire, luchan contra las llamas, el fuego siguió creciendo hasta alcanzar las 50.500 hectáreas y su contención está en 30%.

Paradise, la localidad que quedó completamente arrasada por la conflagración, se encuentra en la falda de la Sierra Nevada, en un clima seco y soleado que en el último medio siglo atrajo a muchos jubilados, lo que hizo que la población se triplicase en 50 años. Medios de comunicación apuntaron que muchas de las personas que permanecen desaparecidas son gente mayor, algunas con movilidad reducida, lo que dificultaría su evacuación.

Las únicas víctimas mortales identificadas hasta la fecha por las autoridades son Jesús Fernández, de 48 años y residente en Concow; Carl Wiley, de 77 años y residente en Magalia y Ernest Foss, de 65 años y residente en Paradise.

El origen del incendio sigue siendo desconocido y la portavoz de Calfire Janet Upton indicó que los investigadores están explorando todas las posibles causas, “incluyendo la posibilidad de que el fuego se iniciara a partir de una chispa de equipamiento eléctrico”.

La mayor compañía proveedora de gas y electricidad del estado, Pacific Gas & Electric Co. (PG&E), informó a los reguladores de que detectó un problema en una línea de alta tensión cercana al área donde se declaró el incendio solo unos minutos antes de que se iniciasen las llamas.