14 jun. 2025

Imputadas por quíntuple asesinato “están pegadas” al caso, dice fiscala

Ayer declararon Araceli Sosa y Alba Armoa, imputadas de cómplices de la muerte de cinco personas. La defensa pidió que se las desvincule, pero la fiscala del caso decidió que sigan procesadas y en prisión.

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Araceli Sosa (izq.) y Alba Armoa están vinculadas al quíntuple homicidio en calidad de cómplices.

Foto: Archivo.

Cerca de ocho horas duró la declaración de María Araceli Sosa y Alba Rosalía Armoa (18), imputadas como cómplices del quíntuple crimen ocurrido en el lugar conocido como Casa del horror, que saltó a la luz el lunes 8 de octubre.

La versión que dieron ambas, lejos de desvincularlas, las compromete más aún en el proceso, de acuerdo con las palabras de la fiscala del caso, Esmilda Álvarez. “Están pegadas a la escena del crimen, en qué condiciones, todavía no podemos saber”, afirmó de manera contundente.

La agente del Ministerio Público explicó que también participaron ambas de un procedimiento para reconocer objetos.

Fue en ese momento que Araceli reconoció que tenía en su poder una cartera que había sido de Elba Rodas, una de las fallecidas.

La cartera fue decomisada de uno de los casilleros de la empresa donde trabajaba Araceli y la joven se defendió diciendo que la cartera le había regalado Marabel y no sabía de su origen.

En el momento de prestar declaración, la otra imputada, Alba Armoa, reconoció que mantenía una relación sentimental con Marabel y admitió haber estado en el sitio que hoy es conocido como la Casa del horror, por más de una semana sin darse cuenta de que allí estaban enterradas cinco personas.

Su abogada, Griselda Acosta, pidió que se la desvincule de la causa, aseguró que la misma es una víctima más en el caso y que debe seguir el proceso desde su casa. “Creemos que él (Bruno) la estaba embaucando, por la forma en que se comportaba. Ella es una chica de 18 años y él fue su primer novio, creemos que ella es una inocente más”, afirmó la profesional.

NO CONOCÍA A LA FAMILIA. El abogado Néstor Candia, representante legal de Araceli, también reveló que su defendida declaró que nunca tuvo conocimiento de la existencia de Dalma Rojas, esposa de Bruno, de sus hijos Santino y Saulo, de 6 y 4 años, y de sus padres Julio Rojas y Elba Rodas, todos fallecidos en el macabro hecho. “Bruno le decía (a Araceli) que vivía solo y que sus familiares fueron a Argentina. Organizaba cenas y encuentros en la casa”, explicó.

Si bien no trascendieron nombres, ambas mujeres dieron información a la fiscala del caso de más personas que pudieron haber ingresado a la casa ubicada sobre la calle Oliva, antes y después de lo ocurrido.

La fiscala Álvarez reveló que ya tenían esa información que fue corroborada por las imputadas.

Tanto Araceli como Alba están recluidas en la penitenciaría de mujeres Casa del Buen Pastor y seguirán en ese lugar mientras dure la investigación.

Marcelo declara el miércoles
Marcelo Sosa Díaz, otro de los imputados en el caso, será llamado para una declaración indagatoria con la fiscala Álvarez, confirmaron fuentes del procedimiento. El joven está detenido en la cárcel de Emboscada, mismo lugar donde está recluido Bruno Marabel, principal sospechoso del crimen. Sosa está recluido en un pabellón cristiano junto a otros nueve internos, confirmaron sus padres. Marabel, por su parte, se encuentra aislado de la población del penal.