10 jun. 2025

Hacia el rescate del céntrico barrio Loma San Jerónimo

El barrio Loma San Jerónimo de Asunción, que fuera recientemente declarado “De Valor Histórico, Arquitectónico, Cultural y Patrimonial”, por el Ministerio de Educación y Cultura y por la Municipalidad de Asunción, es centro de interés de un proyecto general de recuperación de su memoria colectiva, así como de revitalización de sus condiciones físicas-ambientales. Un amplio trabajo que viene desarrollando temas importantes como el fortalecimiento de las actividades económicas, la calidad de vida cotidiana, la capacidad de hacer efectivo el reto de solidaridad y cohesión social, la sostenibilidad de su ecosistema y patrimonio cultural. Cuestiones que, finalmente, dependerían en gran parte de nuestra capacidad colectiva para reinventar y gestionar nuestros pueblos y ciudades.

Este proyecto general es impulsado desde el 2005, con un enfoque ambiental, por la arquitecta Beatriz Franco Paats - ejercitada profesional en el desarrollo sustentable- , iniciando su estudio dentro del Máster en Gestión Ambiental del Rectorado de la UNA y prosiguiendo como propuesta de extensión universitaria del Instituto Superior de Arte (ISA), Facultad de Arquitectura UNA, para mejorar las condiciones económicas de los moradores a través de la concientización de la vecindad y la consolidación de su tradicional celebración de la Pasión de Cristo. Al mismo tiempo, además de los vecinos, estudiantes y docentes del ISA, se fueron acoplando últimamente nuevos protagonistas y colaboradores, como la misma Dirección de Turismo y algunos estudiantes de la carrera de Arquitectura y Diseño de la Universidad Columbia del Paraguay, para secundar en diferentes ámbitos.

El popular barrio Loma San Jerónimo se encuentra ubicado dentro de la unión de la calle Oliva y la plaza Gaspar Rodríguez de Francia. Es uno de los barrios céntricos más antiguos de Asunción (una de las siete colinas fundacionales), ubicado muy próximo al río Paraguay, casi frente a la Bahía de Asunción. Un área que cuenta con estrechos callejones, senderos empinados, casas apretujadas entre ellas y vetustos árboles. Un emplazamiento urbano colonial y anárquico que sobrevivió, hasta ahora, a los cambios de criterios en los trazados del territorio capitalino - dispuestos primero por Gaspar Rodríguez de Francia y posteriormente por otras ordenanzas sobre el uso del suelo.

Existen dos sellos que forman parte de la esencia del barrio Loma San Jerónimo: la singular disposición de su contexto y paisaje y la tradicional celebración de la Semana Santa, que se mueven entre la creencia, el rito, la cooperación y el sentimiento de pertenencia. El habitante de este barrio se enorgullece de su lugar y su temprana devoción a la Cruz. Ésta preside sus despertares de cada día, sus fiestas populares y la representación de la Pasión de Cristo, así como la propia capilla de San Jerónimo, que es la culminación geográfica y simbólica de una de las representaciones del vía crucis más añosas de nuestro país.

Ayer, viernes 10 de abril, por la tarde, se realizó la procesión/representación de la Pasión de Cristo de este año. Las estaciones se iniciaron en la planicie situada frente a la Imprenta Nacional y culminaron en la elevada capilla de San Jerónimo. Los organizadores de la personificación de las escenas de la Pasión fueron los pobladores del barrio, estudiantes y profesores, sumándose a la procesión todos los demás entusiastas de este proyecto. El uso de luminarias a lo largo del recorrido y el cuidado en el vestuario complementaron una teatralidad, que se enriqueció con la activa participación de las comisiones vecinales y la propia escenografía urbana del inusitado recorrido.

El fortalecimiento de este evento simbólico, aunque sólo sea parte del proyecto general de rehabilitación del barrio, es una contribución a la práctica urbana, la audacia comunitaria y al trabajo en equipo. Primeramente, porque resulta enriquecedor poder recuperar y reanimar los actos ilustrativos de participación ciudadana y tratar de contribuir, desde las universidades, a que el barrio sea un nuevo referente turístico de Asunción. Seguidamente, porque se logra hacer gestión en la ciudad a través de experiencias investigativas y culturales compartidas por los pobladores del barrio y diversos estudiantes, ya que la proyección social y cultural de las universidades debe ser más valiosa que sus roles meramente formadores. Todavía existe una tercera razón de ponderación para considerar estas acciones: la revalorización de nuestros bienes culturales, a la que no debemos ser distantes, amplía y profundiza nuestra visión de las condiciones de desarrollo social y cultural de nuestro contexto.

De igual forma, hoy en día no cabe duda de que nuestros pueblos y ciudades tienen que evolucionar y contribuir a desempeñar un protagonismo creciente en la vida de los ciudadanos y en los planes de las instituciones públicas. Cada vez más los propios habitantes deben asumir nuevas funciones y una mayor responsabilidad para fomentar los valores de solidaridad y ciudadanía, que, a veces, son más difíciles de impulsar desde los otros niveles de la organización política y administrativa del Estado.

Los ritos que perduran, como los de la representación de la Pasión de Cristo, no son ya simplemente celebraciones de un grupo de individuos que sacan toda su virtud de un precepto religioso - de marcado carácter cristiano- , sino acciones colectivas que revelan muchas significaciones nuevas. Por tanto, es muy interesante vincular al arte en casos como éste, puesto que entre los valores simbólicos es el lenguaje artístico, quizás, el que expresa con mayor nobleza, que ninguna otra actividad, la presencia del hombre en su realidad.

En este contexto, podríamos asociar - desde el punto de vista del funcionamiento del arte- los esfuerzos del evento/performance de ayer en Loma San Jerónimo, más sus rastreos video-fotográficos, con la importante y extensa serie Alcorisa, del artista contemporáneo español Santos Montes (Santander, 1949) - incluido por la Phaidon de NY entre los 100 fotógrafos más representativos del arte contemporáneo- . Un compendio de obras realizadas en soporte fotográfico en blanco y negro y en formato de vídeo, resultados de su trabajo artístico durante más de cuatro años en la comunidad de Alcorisa (una localidad de unos 3.500 habitantes situada en la provincia de Teruel). El conjunto de esta serie está subdividido en cinco grupos (Pregonero de Alcorisa, Rostros de Alcorisa, Rostros de la Pasión - que son las mismas personas del grupo anterior, pero representando su otro papel dentro de la Pasión de Cristo- , Pasado - sobre los recuerdos de la guerra civil- y Celebración - en torno a las distintas fiestas colectivas- , que intentan presentar en secuencias narrativas las distintas imágenes de Alcorisa registradas por este artista.

Podríamos decir que con la serie Alcorisa se ofrece al espectador la posibilidad de descubrir, a través del arte de Montes, la vida cotidiana y las celebraciones de una colectividad y de los individuos que la conforman. Un análisis del paso del tiempo y de la memoria como reflejo de alma agrupada que, igualmente - y sin proponérselo- , contribuyó a la difusión de este pueblo como resucitado destino turístico en España.

Volviendo al proyecto general de rehabilitación del barrio Loma San Jerónimo, podemos anotar que la recuperación de la vida, la energía y el simbolismo de los barrios céntricos de las ciudades es hoy un tema prioritario tanto en Europa como en Estados Unidos y América Latina, donde la tradición suburbana ha debilitado el papel de los downtown. Y que ciertos casos, como el “efecto Guggenheim”, ocurrido en el casco antiguo de Bilbao, no son trasladables a otras ciudades mediante la mera construcción de un edificio emblemático - como suele hacerse aquí, sin siquiera tener una planificación urbana tentativa- . El “efecto Guggenheim” simboliza la voluntad de cambio de una sociedad, la confianza y la determinación de que es posible rehabilitar y construir el Bilbao del siglo XXI sobre las ruinas de un territorio céntrico - que perdió su uso habitacional- y un sistema productivo agotado.

Procesión/representación de la Pasión de Cristo de este año, en el barrio Loma San Jerónimo.

Cultura popular

Alban Martínez Gueyraud

Crítico de arte

albanm63@hotmail.com