El Guma lo sufrió mucho, ya que los brasileños atacaron por todos lados y la defensa aguantó con un buen partido de la zaga central con Viera y Barboza; sujetados atrás por Martín Silva.
El uruguayo Agustín Canobbio fue una tortura toda la noche, porque desbordaba por ambos costados y generaba peligro constante.
PésiMA LABOR. El árbitro uruguayo Gustavo Tejera tuvo fallos increíbles, que seguramente con la herramienta del VAR iban a ser modificados.
Primero la falta del portero Bento a Antonio Bareiro, una entrada desmedida digna de ser cobrada como penal y luego el penal que si cobró a favor de Paranaense, en una infracción inexistente de Miguel Samudio a Canobbio.
Pero ese penal fue tapado de forma excelsa por Martín Silva ante un Pablo que se descubrió por su postura en la previa al remate.
La obra de arte del partido estuvo a cargo de Cristian Riveros, que transformó un centro que le quedó largo en un tacazo y posterior gol para la victoria repollera. La categoría está intacta en el volante de 39 años, esa mezcla de experiencia y la juventud en el plantel de Libertad lo aploma para pelear en la Libertadores.
Libertad sacó un triunfazo ante Paranaense por 1-0 para picar en punta.
El martes visita a Caracas, a las 18:15, y de ganar se meterá a octavos de final.
11
victorias alcanzó el Guma ante rivales brasileños por torneo Conmebol, de un total de 37 partidos.
6
juegos sin perder como local acumula Libertad por Libertadores, la última el 22/10/2020 (2-4 vs. DIM).
Martín Silva
El golero uruguayo fue el primero en la resistencia de Libertad. Además se consolidó con el penal atajado a Pablo.
Mucha autocrítica
El entrenador Daniel Garnero fue muy sincero sobre el trámite del partido, donde por varios momentos fue superado por el rival. “No tuvimos la asociación de juego que necesitábamos en el primer tiempo; los cambios nos sumaron velocidad; no pudimos aprovechar esos espacios; a lo último, no tuvimos efectividad para definir el juego. Debemos tener mayor claridad en las jugadas que tenemos”, dijo el DT.