En 2003, el Gobierno uruguayo, con una deuda del 100% del producto interior bruto, alargó los plazos de pago de su deuda para poder pagarla, en una negociación en contra de la voluntad del FMI, algo que a la postre le permitió al país vecino de Argentina mejorar económicamente. “Con una negociación seria y sensata con los acreedores, siento que vamos a poder ganar tiempo para crecer, y aquí viene la gran disyuntiva de cómo crecemos”, insistió.
DIFÍCIL SOLUCIÓN. Por su parte, el Fondo Monetario Internacional (FMI) sigue completamente comprometido en intentar ayudar a Argentina, pero una solución rápida es difícil por las incertidumbres a un mes de los comicios presidenciales, dijo un portavoz. “Nos moveremos tan rápido como podamos e intentaremos hacer lo mejor que podamos para Argentina”, dijo el portavoz del organismo, Gerry Rice. “Debido a la compleja situación y la incertidumbre política ha sido difícil avanzar rápidamente”, añadió.
CRECE LA DEUDA. Argentina registraba a finales del segundo trimestre del año una deuda externa bruta de 283.567 millones de dólares, lo que implica que el stock de deuda creció en USD 22.091 millones en términos interanuales. Según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), en el segundo trimestre el stock de deuda externa bruta total con títulos de deuda a valor nominal se incrementó en USD 7.819 millones con respecto a finales de marzo. “Este incremento se debió principalmente al aumento de la deuda del Gobierno general, en USD 6.248 millones”, señaló el organismo oficial. Mientras, Moody’s vaticinó una caída del 2,5% en la economía para 2020, y una inflación en torno al 40% anual.
Empresas vieron caer rentabilidad y esperan mejoras
El 51% de las empresas en Argentina admite que este año marcado por la crisis económica su rentabilidad bajó, pero 42% cree que mejorará el próximo año, de acuerdo a los resultados de una encuesta difundidos ayer. Según el sondeo, realizado por la consultora EY Argentina, 51% de las firmas consultadas dijo que su rentabilidad decreció este año, 36% señaló que se incrementó y 13% sostuvo que se mantuvo estable. Para el 2020, la expectativa es que la rentabilidad mejore en 42%, mientras que igual proporción espera, por el contrario, que baje y 17% no prevé cambios. Respecto a las perspectivas de inversiones, el 53% considera que se mantendrá al mismo nivel que en este año, el 25% que crecerán y el 23% que decrecerán. Por otro lado, el 38% de las 60 compañías de diversos sectores comprendidas en este sondeo dijo que evalúa tomar deuda el próximo año.