“Un hombre de poco hablar y mucho hacer”, describía ayer en una frase el padre Lalo a Paolo Pederzani Cassanelli, quien falleció el martes a los 81 años. Un ingeniero en construcción que amaba la cocina, tanto que se dedicó a ella gran parte de su vida.
Paolo era italiano y llegó a Paraguay en 1950 junto a su familia. Se casó con Ana María Rodríguez, conocida como Pilita, y tuvieron 9 hijos, 7 mujeres y 2 varones. La mayoría tiene su especialidad en la cocina, aunque cada uno posee una carrera universitaria.
Gracias a su espíritu solidario fue uno de los creadores de la Comilona de Teletón. “Realmente tuvo una vocación muy grande de servicio, siempre estuvo atento a todos los llamados de ayuda”, comentó una de sus amigas, Marithé Rassmussen.
“Hay que destacar que Paolo y su esposa no tuvieron ningún hijo con discapacidad, pero él se involucró de lleno con Teletón y otras causas sociales”, resaltó Niti Monti durante el velorio realizado en el Parque Serenidad.
Como legado queda toda su trayectoria gastronómica, mientras en lo físico queda el restaurante De La Casa Pederzani, dirigido de hoy en más por sus hijas.