El juicio oral concluyó ayer en tribunales. Los jueces Manuel Aguirre, Lourdes Peña, y Rosana Maldonado, que participó vía telemática, hallaron al acusado culpable de cohecho pasivo agravado.
En el juicio, la fiscala Liliana Alcaraz, solicitó las citadas penas, mientras que la defensora Carla Rivarola, pidió la sanción de 2 años de cárcel, con la suspensión de la ejecución de la condena. Además, que el dinero sea destinado a una entidad de beneficencia.
El fiscal reconoció los hechos en el juicio, y pidió disculpas por lo ocurrido. Solicitó una oportunidad para resarcir el daño.
El fiscal, quien se desempeñaba en la ciudad de Quiindy, había sido filmado el 27 de abril del 2018, supuestamente por haber recibido una coima de USD 15.000, para finiquitar un proceso judicial.
Se probó que había pedido la suma de 60 mil dólares, aunque tras las negociaciones, quedó en 15 mil dólares. Al final, le entregaron G. 50 millones marcados, en un operativo encubierto. En la guantera del vehículo tenía los G. 20 millones decomisados.
En el caso, el ciudadano español Ángel Aja Muela, había sido denunciado por su compatriota Juan Carlos López, por los supuestos delitos de apropiación, estafa y evasión impositiva.
Según el testigo, el abogado César Bóbeda, quien defendía al español, el proceso se inició con el fiscal Óscar Talavera y la jueza Adriana Pedretti, donde también la habían pedido coima, por lo que los denunció ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados.
Luego de esto, el caso pasó a Garay Azucas, que pidió dinero para expedirse en forma favorable para un incidente de nulidad. Los jueces señalaron que el caso era bastante grave.