La disposición de quedarse en las casas ha contribuido notoriamente para la disminución de los hechos de robos y asaltos, considera la comisaria Elena Andrada, jefa de Relaciones Públicas de la Policía Nacional.
El decreto por del presidente, Mario Abdo, comenzó a regir desde el 10 de marzo y restringe la salida de las personas de sus viviendas, primero entre las 20.00 y 4.00; luego se amplió a las 24 horas desde el pasado fin de semana, con excepción de salidas justificadas.
Para Andrada, esta disminución de inseguridad en las calles es debido a los estrictos controles que realizan agentes policiales y militares para evitar la aglomeración de personas y el tránsito por las calles, en cumplimiento a la norma preventiva de restricción de las salida de las casas.
“Los trabajos de control que se vienen haciendo, hacen que los amigos de lo ajeno no puedan operar en las calles”, apunta la jefa policial.
Sin embargo, no hay certeza de que efectivamente sea la estricta presencia de las fuerzas públicas en las calles lo que haya desalentado a los delincuentes, o el sometimiento de la gente a la medida de quedarse en casa. O simplemente ellos mismos, los delincuentes decidieron acompañar la prevención quedando en casa.
Tampoco Relaciones Públicas cuenta con cifras de los reportes oficiales y actualizados que puedan respaldar esta sensación de disminución de la inseguridad, por los trabajos que el personal está realizando en la atención y asistencia en el cumplimiento de las normas sanitarias. Pero aseguran que existe una disminución en hechos de robos.
Días atrás, el subcomandante de la Policía Nacional, Luis Arias Navarro, afirmaba que los robos agravados y los robos de vehículos disminuyeron de forma significativa, teniendo en cuenta que el personal de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas recorren las calles en el marco del cumplimiento al decreto presidencial.
Por otro lado, la directora del Sistema 911, Liliana Díaz, resaltó que las llamadas de emergencias se redujeron considerablemente desde el 6 de marzo pasado, cuando comenzaron a darse los primeros casos de coronavirus.
Bajón histórico
Desde el 6 de marzo al domingo último, el 49 por ciento de las llamadas al 911 fueron de urgencias, que implican la intervención policial. Sin embargo, el 51 por ciento de las llamadas fueron de no emergencias. “Esto es un hecho histórico para el 911, en atención a que el año pasado, del 92 al 90 por ciento se logró reducir al 88 por ciento las llamadas de no emergencias al sistema”, explicó la directora Liliana Díaz.