El paro de camioneros no solo afecta a la economía paraguaya; tiene efecto del otro lado de la frontera. En Foz de Yguazú (Brasil) unos 4.500 camiones están varados esperando el fin del conflicto de sus pares paraguayos, para cruzar frontera, según denuncian transportadoras brasileñas.
Aseguran que tienen una pérdida multimillonaria por la dificultad de entregar los productos al Paraguay. Hay colas de vehículos dentro y fuera del Puerto Seco de Foz, en el acceso al Puente Internacional de la Amistad, entre otros puntos de la vecina localidad.
El Sindicato de Empresas de Transporte de Carga de Foz do Yguazú y Región (SindiFoz), asegura que la pérdida para las empresas transportadoras brasileñas alcanza 1,7 millones de reales por día (unos USD 320.000), desde el inicio de la huelga.
“Estos camiones, incluso cuando están parados, tienen costos operativos normales. Hoy tenemos un costo estimado de 1,7 millones de reales por día por un camión detenido en la frontera. Aparte de los valores de las mercancías que están detenidas y otros sectores que están siendo afectados”, denunció Rodrigo Atilio Ghellere, presidente de SindiFoz a medios brasileños.
Según SindiFoz, muchos camioneros retenidos se encuentran en gasolineras, carreteras y en el Porto Seco, que está operando a máxima capacidad. La Receita Federal (Aduana del Brasil) informó que más de 680 camiones estaban estacionados en el puerto.
Camioneros brasileños prefieren quedarse en la frontera por temor al vandalismo de sus pares paraguayos, de acuerdo con expresiones desde Brasil.