En sesión ordinaria, el concejal liberal, doctor Héctor González, pidió el tratamiento sobre tablas del estudio de intervención de la Municipalidad, que fue aprobada por mayoría. En ese momento, los ediles liberales (Estrella Quevedo, Sisinia Silva, Miguel Domínguez y Gustavo Bonzi), defensores de Urbieta, se retiraron de la sesión.
Tras verificarse el quórum, se dio lectura de la acusación contra el Lord Mayor y luego se llevó a votación arrojando 7 votos a favor y una abstención. Votaron por la intervención los concejales Héctor González, Epifanio Ávalos (liberales), Ytalo Centurión, Rodolfo Villalba, Javier Vergara, César Samudio y Alejandro Lavand (ANR), mientras se abstuvo el presidente de la junta, Asunción Carballo.
Entre las acusaciones que anticipó el doctor González, aclarando que solo eso para cabeza de proceso, resaltan un préstamo bancario de 4 mil millones de guaraníes para obras de desagües pluviales, que sin embargo se usaron para pago de salarios y transferencias directas a comisiones vecinales por algunas obras ejecutadas a medias; contrato con una empresa Conserpar por unos 8 mil millones de guaraníes en el 2016, sin que hasta la fecha hayan terminado las obras anunciadas en el proyecto; otra que hace 6 meses se reinició por presión ciudadana y otras inexistentes, denuncias judiciales de funcionarios despedidos sin justificación, deudas a funcionarios municipales (4 meses de atraso), denuncias de la Diben por falta de transferencia desde 2016, falta de transferencia al Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Concepción, millonarias deudas a la Caja de Jubilaciones que también derivó en denuncias judiciales y un remate de varios terrenos municipales a la vista.
La venta del Puerto Municipal por 700 mil dólares fue el inicio del cuestionamiento al intendente Alejandro Urbieta. El dinero lo utilizó en pago de salarios, aguinaldos, reparación de maquinaria y rehabilitación del equipo de residuos patológicos. Hace 15 días, la Junta aprobó el presupuesto del año 2020 de 30 mil millones de guaraníes, porque el intendente argumentaba buenos movimientos financieros. Sin embargo, una semana después, presentó 2 pedidos: Uno para un préstamo bancario de 500 millones de guaraníes para cumplimiento de compromisos por la baja recaudación. Y el otro, aprobación de venta de 2 terrenos municipales precisamente con el argumento de compromisos contraídos y baja recaudación.