El 2020 será un año de elecciones municipales y las campañas ya comenzaron en las 255 comunas de todo el país. Es por eso que los estudiantes secundarios advierten que harán un fuerte control en el uso de los recursos del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide). No permitirán que sigan “robando” la educación.
Una campaña nacional para controlar cada proyecto de infraestructura y de alimentación escolar con el Fonacide, organizan para el año que viene desde la Federación Nacional de Estudiantes Secundarios (Fenaes).
“Se viene una época electoral el año que viene y no vamos a permitir que este dinero se use para la sucia política. Le están robando la educación a las personas más vulnerables, a los niños”, apuntó Tamara Cabello, coordinadora ejecutiva de la Fenaes.
Un informe de la Contraloría General de la República indica que hay G. 16.000 millones en concepto de presuntos hechos punibles con dinero del Fonacide, por parte de municipalidades y gobernaciones. Este dinero corresponde a los últimos seis años que lleva el programa y las entidades comunales recibieron casi G. 3 billones.
Cabello critica igualmente que en zonas más vulnerables del país es donde más se rifan los recursos.
MÁS RECLAMOS. La instalación de una “carpa de resistencia”, protestas y cierres de calles protagoniza un grupo de estudiantes de Mayor Otaño desde hace dos semanas, reclamando el mal uso de fondos del Fonacide en al menos tres instituciones educativas de esta comunidad.
“Se construyeron baños sexados valuados en G. 131 millones cada uno, hasta ahora ninguno está funcionando”, reclamó uno de los jóvenes desde uno de los puntos más lejanos del sur del país.
Asimismo, Contrataciones Públicas declaró nula la construcción de un baño en una escuela por presuntas irregularidades.
“No somos dueños de la verdad, pedimos la destitución o renuncia del intendente (Pedro Chávez ANR), pero si antes se necesita una auditoría, aceptamos”, agregó uno de los estudiantes manifestantes.
Los jóvenes ya remitieron los antecedentes al Ministerio Público y a la Contraloría.
CAMBIOS. Desde Fenaes también proponen modificar la normativa para permitir, vía legal, que miembros de la comunidad educativa participen en los proyectos de infraestructura y de alimentación como contralores.
“Nosotros podemos verificar que se cumplan contratos, que avancen las obras y que realmente se realicen, ya que algunas figuran solo en los papeles”, indicó Tamara Cabello, de Fenaes. Este pedido debe impulsarse desde el Parlamento, agregó.
Le están robando la educación a las personas más vulnerables, a los niños que buscan una buena educación.
Tamara Cabello,
coordinadora de Fenaes.
Vamos a seguir reclamando hasta que se intervenga el Municipio, hay demasiadas denuncias con el Fonacide.
Nelson Maciel,
alumno de Mayor Otaño.
