En prosecución a la investigación del operativo denominado Troya, llevado a cabo en varias ciudades del departamento de San Pedro, ayer fueron hallados abandonados dos vehículos blindados que estaban siendo preparados para atracar a una transportadora de caudales.
Los procedimientos se vienen realizando en busca de una banda de asaltabancos y camiones de caudales que se inició en la noche del martes con detenciones de supuestos integrantes, siguió el miércoles y ayer con allanamientos e incautaciones de evidencias. Para la Policía, la gavilla, de unos 20 integrantes, se encuentra cercada por la fuerzas del orden en la zona.
Según las informaciones que manejan los investigadores de la Policía y Fiscalía, el asalto contra el camión de caudales se debía materializar en estos días en la zona sur del departamento de San Pedro, en un tramo de la ruta que una las ciudades de Liberación con Santaní, sobre la ruta PY08 Doctor Blas Garay.
Ayer, dos vehículos fueron dejados abandonados en la compañía 6.000 Ykua Porã del distrito de San Estanislao.
Uno de ellos estaba preparado para la instalación de un arma de guerra. Los intervinientes sostienen que el grupo preparaba un atraco y para ello tenía montado una gran estructura y logística, además habían ingresado al país un arma de guerra, antiaérea específicamente 1.50 para poder inutilizar y detener al transportador de caudales. El arma aún no fue encontrada.
Hasta el momento el operativo Troya arrojó la detención de 4 hombres, la incautación de 4 vehículos y la suma de G. 10.300.000. Policías de varias unidades buscan dar con paradero del cabecilla del grupo, que ya está identificado y tendría en su poder el arma de guerra.