Mastercard, una de las tarjetas de crédito más importantes del mundo, tiene previsto introducir la tecnología contactless (sin contacto) como medio de pago en el corto plazo. Se aplicará tanto a la tarjeta de crédito, como débito y las comisiones se mantendrán.
Rodolfo Durán, vicepresidente de Desarrollo de Aceptación e Innovación de la empresa en América Latina, manifestó que el proceso para desembarcar en el mercado paraguayo está muy avanzado y la idea es empezar a diseminar el nuevo producto dentro de unos seis meses.
Explicó que ya se dialoga con las emisoras de los plásticos y con entidades financieras nacionales para enseñar los alcances de la tecnología.
Si bien en otros países de América Latina la compañía ya ofrece el pago sin contacto, la cartera paraguaya es muy pequeña en comparación con el resto de las economías, destacó Guzmán. Esto hace que la migración sea un poco más lenta, pero ratificó que próximamente los agentes económicos ya tendrán que dar la nueva tarjeta. Los comercios deberán recibir las terminales de POS adecuadas, las cuales puedan leer el mecanismo.
“El 72% de las tarjetas emitidas en Latinoamérica ya están listas para migrar a contactless y el resto de los bancos está trabajando. Como hay un portafolio menor en Paraguay, los bancos piensan que hay mayores barreras de entrada. Pero Mastercard viene trabajando con cuatro proveedores de tarjetas para asegurarnos que hay ofertas más competitivas para los bancos paraguayos”, expresó.
Los plásticos también estarán sincronizados con los dispositivos móviles, para que el usuario solo acerque su teléfono al mecanismo para hacer los pagos.
Mastercard es patrocinador de la Copa América 2019 y aprovechó el evento deportivo, desarrollado en Brasil, para enseñar la innovación. Los aficionados pueden comprar las entradas en las boleterías de los estadios con las tarjetas sin contacto.
La forma de usar es muy simple, y similar a la tarjeta convencional. La única diferencia es que el lector ya no necesita que se haga el paso comúnmente conocido como “rayar”. Solo aproximando el plástico, el POS ya lo reconoce.