De lo más emocionante y vibrante fue el empate de anoche entre Guaraní y Libertad, jugado y disputado en cada sector de la cancha. Un empate que le sienta bien al local que sigue como sólido líder, mientras que la visita aún no conoce de victorias.
Por primera vez en el campeonato, Guaraní empezó perdiendo un partido; fue por un tremendo zapatazo de Héctor Villalba que no pudo tapar Servio. Pero el Aurinegro lucha siempre, tanto entrega que hasta entre compañeros se lesionan. Miguel Benítez, en desafortunada maniobra, dejó herido a su compañero Alberto Contrera, pero el Piru antes del golpe se había mandado un pase de lujo para habilitar a José Florentín, que en el mejor momento de su carrera volvió a marcar para ser el máximo artillero del Aborigen en el torneo.
Ya en la complementaria, Guaraní siguió con la intensidad, por eso que el remate de Fer Fer le quedó a disposición a Fernández Cedrés y puso el 2-1 a los 66’.
El ida y vuelta se volvió en más vuelta para el Legendario, que retrajo líneas y Libertad lo empezó a atacar por todos los costados.
La mala fortuna dio que un centro mordido de Hugo Martínez, la defensa aurinegra no la pueda despejar para que Lorenzo Melgarejo, lanzado en ataque, convierta el gol del empate.
Libertad no logra ser eficaz en sus ataques y cede mucho en las marcas, eso le está costando no ganar. Mientras que a Guaraní, esta vez, le faltó mayor fortuna y cortar mejor los circuitos del rival para llevarse una victoria.
