REUTERS, AFP y EFE
SAO PAULO - BRASIL
La elección del 7 de octubre en la mayor economía de Latinoamérica conlleva riesgos para las constructoras, a pesar de que los principales candidatos a la presidencia de Brasil expresaron su apoyo a los programas de subsidio en el área de vivienda, dijo ayer una ejecutiva de Moody’s.
Las ganancias de las aerolíneas también podrían verse afectadas si los resultados de los comicios golpean al valor del real, agregó la agencia calificadora Moody’s. Marianna Waltz, directora del equipo de finanzas corporativas para América Latina de la agencia, dijo en una entrevista que ningún candidato de Brasil estaba planeando cambios estructurales en el popular programa de vivienda Minha Casa, Minha Vida, clave para los ingresos de las constructoras. Pero señaló que cualquier deterioro en las finanzas públicas después de la votación, o una disminución en la confianza del consumidor, dejaría al sector significativamente expuesto. “No parece que vayamos a tener cambios sustanciales en el marco regulatorio actual, lo que es positivo. Dicho eso: si la economía no está bien, si hay una reversión en la confianza del mercado, la demanda no va estar allí”, dijo Waltz.
urnas electrónicas. El Tribunal Superior Electoral de Brasil comenzó a preparar las urnas electrónicas que serán usadas en la primera vuelta de las elecciones presidenciales, legislativas y de gobernadores del 7 de octubre. Cada urna está destinada a un circuito específico de cada estado. Para dejarla lista, los funcionarios ingresan en ella los datos de los electores de ese circuito y de los candidatos elegibles. Luego lacran el aparato, para que la información no pueda modificarse. La urna tiene botones para digitar el número de la lista elegida y una pantalla que muestra una imagen del candidato seleccionado, antes de confirmar el voto. El dispositivo comenzó a utilizarse en las elecciones municipales de 1996 en Brasil, uno de los pocos países que posee en la actualidad un sistema electoral 100% electrónico.
haddad se acerca. El candidato del izquierdista Partido de los Trabajadores a la presidencia, Fernando Haddad, está acortando la distancia con el líder de las encuestas para la primera ronda de los comicios del 7 de octubre, el representante de extrema derecha Jair Bolsonaro, y además lo vencería en un balotaje, mostró un sondeo. Bolsonaro se mantuvo en 28% de intención de voto en un sondeo divulgado por el periódico Estado de S. Paulo y la red Globo TV, la misma cifra que en la consulta de la semana pasada. Haddad cuenta con el 22% de respaldo, un avance de 3 puntos porcentuales. En el probable escenario de una segunda vuelta, exigida por la ley brasileña si ningún candidato obtiene la mayoría en la primera votación, Haddad cuenta con 43% de respaldo frente al 37% de Bolsonaro. La semana pasada, Ibope mostró a ambos candidatos empatados con 40%.
La elección en Brasil, una de las más cerradas desde que el país retornó la democracia hace tres décadas, se produce después de cuatro años de investigaciones sin precedentes que revelaron niveles impresionantes de corrupción a nivel político.
