Con un partido excepcional del uruguayo Luis Suárez, que convirtió dos goles (uno de penal picando el balón sobre Keylor Navas), Barcelona goleó 3-0 al Real Madrid en el mismísimo Santiago Bernabéu y pasó a la final de la Copa del Rey.
Con un primer tiempo de amplio dominio de los merengues, donde Vinicius y Benzema se encargaron de desperdiciar goles casi hechos, la segunda etapa pagó por todos su pecados.
Messi empezó a generar jugadas y Suárez aprovechó, marcó a los 50’, luego a los 69’ creó la jugada que Varane mandó en contra y, al final, a los 73’, el Pistolero generó un penal que picó y sentenció el partido por 3-0 y la serie 4-1 a favor del cuadro culé.
El rival del Barcelona saldrá del juego que hoy tendrán Valencia ante Betis en Mestalla, en la ida igualaron 2-2. La final se disputará en el estadio Benito Villamarín, del Betis, el 25 de mayo.