08 ago. 2025

El Papa mantiene viaje a Irak pese a recientes ataques

Las minorías religiosas que conviven con el Islam en Irak.

Las minorías religiosas que conviven con el Islam en Irak.

El papa Francisco afirmó que mantiene por ahora su histórica visita a Irak, que comenzará mañana, pese a la violencia que castiga al país, escenario de un nuevo ataque con cohetes el miércoles contra una base militar que alberga tropas estadounidenses.

“Pasado mañana (por el viernes), Dios mediante, iré a Irak para una peregrinación de tres días. Hace mucho tiempo que quiero encontrarme con ese pueblo que ha sufrido tanto”, dijo Francisco, de 84 años, durante su audiencia semanal.

“Les pido que acompañen este viaje con sus oraciones (...). El pueblo iraquí nos está esperando, esperó a Juan Pablo II, al que prohibieron ir. No se puede decepcionar por segunda vez a ese pueblo”, agregó. El pontífice argentino desea cumplir la promesa hecha por el polaco Juan Pablo II, quien tuvo que renunciar en 1999 a visitar Irak después de negociaciones infructuosas con el expresidente Sadam Husein.

El papa Francisco confirmó su viaje pocas horas después de que al menos diez cohetes fueran disparados contra una base en la que hay desplegados soldados estadounidenses, en el oeste de Irak. Un civil murió de un ataque al corazón tras la agresión.

VEHICULO BLINDADO El martes, el portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, explicó que Francisco se desplazará en un vehículo blindado durante su visita a Irak, del 5 al 8 de marzo.

“La seguridad es siempre responsabilidad del país que lo hospeda”, precisó Bruni. “El papa además no se reunirá con multitudes”, añadió.

En ninguno de los actos del Papa a lo largo de los tres días se congregarán más de 100 personas. A excepción de una misa en un estadio deportivo de Erbil, en el Kurdistán iraquí, donde se han puesto a disposición de los fieles 10.000 entradas de las 30.000 que puede alojar el lugar, explicó el Vaticano

“La mejor forma de interpretar este viaje es que es un acto de amor”, agregó Bruni, reiterando que el pontífice lo que quiere es que “la gente vea que el Papa está ahí y está cerca de ellos”, resumió.

TENSIONES. Irak es escenario de las profundas tensiones entre Irán y Estados Unidos, presentes directa o indirectamente en el país. Estados Unidos lidera la coalición internacional antiyihadista que lucha contra el Estado Islámico (EI) y tiene en este momento 2.500 militares en el país.

Irán cuenta con el apoyo del Hashd Al Shaabi, una poderosa coalición paramilitar integrada en el Estado iraquí y compuesta principalmente por facciones armadas financiadas y armadas por Irán.

Washington acusa a estos grupos armados de los ataques con cohetes en Irak.

COHETES IRANÍES. Este miércoles, fuentes de los servicios de seguridad iraquíes explicaron que los proyectiles lanzados se habían disparado desde un pueblo cercano a la base de Ain Al Asad y según fuentes de seguridad occidentales eran cohetes Grad, concretamente de tipo Arash, de fabricación iraní y más potentes que los usados recientemente.

Irak vivió un periodo de calma relativa a partir de octubre, cuando se anunció una tregua de las facciones proiraníes después de la amenaza estadounidense de retirar todos sus soldados y diplomáticos del país. Pero recientemente, los ataques se han reanudado.

Durante su visita, que comienza en Bagdad el viernes, Francisco no podrá mezclarse entre la gente ni disfrutar del contacto directo con los fieles, por razones de seguridad y también como medida de precaución debido a la pandemia. Irak parece vivir una segunda ola de Covid-19 y se registran oficialmente 4.500 nuevos casos por día en este país de 40 millones de habitantes.


Encuentro histórico con Sistani
El papa Francisco mantendrá el sábado, en Irak, una reunión muy simbólica con el gran ayatolá chiita Alí Sistani, para profundizar en el diálogo con los responsables musulmanes.
El pontífice visitará la ciudad santa de Nayaf, donde está enterrado el imán Alí, yerno del profeta Mahoma y primer imán de los chiitas.
En el corazón de esta corriente del islam, el papa será recibido por Sistani, de 90 años, que jamás aparece en público. Será por tanto una imagen emblemática también para la población musulmana de un país 60% chiita y 37% sunita.
El argentino Jorge Bergoglio es partidario de los encuentros cara a cara, al considerarlos un símbolo de paz, reconciliación y tolerancia, y suele evitar las sutilezas teológicas. En el 2006, Benedicto XVI citó durante un discurso una frase de un emperador bizantino en la que aseguraba que Mahoma había aportado “cosas malvadas e inhumanas” y sus palabras provocaron diez años de distanciamiento con la comunidad musulmana.