En esta jornada, que coincide con la festividad de San Francisco de Sales, patrón de los periodistas, el Papa aconsejó también a los informadores “escuchar en profundidad, especialmente el malestar social acrecentado por la disminución o el cese de muchas actividades económicas”.
En el mensaje, Francisco constató “que estamos perdiendo la capacidad de escuchar a quien tenemos delante, sea en la trama normal de las relaciones cotidianas, sea en los debates sobre los temas más importantes de la vida civil”.
Y aseguró que “una tentación siempre presente y que hoy, en el tiempo de las redes sociales, parece haberse agudizado, es la de escuchar a escondidas y espiar, instrumentalizando a los demás para nuestro interés”.
Lamentó que “es evidente también en la vida pública, en la que, a menudo, en lugar de oír al otro, lo que nos gusta es escucharnos a nosotros mismos”, mientras que en el mundo de la información criticó “se busca el consenso; más que a la escucha, se está atento a la audiencia”. EFE