“Expreso gratitud a todos los mediadores. Es un buen trabajo mediar para que se haga la paz, gracias a los mediadores”, sostuvo el pontífice tras el rezo del Ángelus desde la ventana del Palacio Apostólico, con la voz alto tomada. “Espero que todo lo que ha sido acordado sea respetado inmediatamente por las partes y que todos los rehenes puedan volver finalmente a casa para abrazar a sus seres queridos. Rezo mucho por ellos y por sus familias”, afirmó.
“Espero ahora que la ayuda humanitaria alcance aún más rápidamente y en gran calidad la población de Gaza, que tiene mucha urgencia”, dijo.
Tanto israelíes como palestinos necesitan “claras señales de esperanza”.
“Espero que las autoridades políticas de ambos, con ayuda de la comunidad internacional, puedan alcanzar la justa solución para dos Estados, que todos puedan decir sí al diálogo, sí a la reconciliación y sí a la paz. Recemos por esto”, terminó. EFE