River Plate venció ayer a Santaní (0-1) y no solo aseguró su permanencia en Primera División, sino que también consiguió 3 puntos de oro en pos de su 1ª clasificación a una competencia internacional en 108 años de vida institucional. El equipo de Philipp sabía lo que se jugaba y lo plasmó en el campo de juego, donde en la primera mitad fue muy superior al local y esa superioridad lo premió a los 17’, cuando Marco Prieto se elevó más que todos en el área para aplicar un cabezazo perfecto, sublime y también didáctico, digno de un gran cabeceador.
Luego, el trámite del juego se volvió mucho más tedioso, debido a la torrencial lluvia que puso en peligro la continuidad del partido, lo cual complicó la manera de jugar, especialmente de la visita, al que le gusta el buen trato de la pelota.
El equipo de Gauto tuvo un leve protagonismo en ese lapso, generó varias situaciones, pero no las pudo capitalizar.
SE RESGUARDÓ. En el complementó, el cual se retrasó por un corte de luz, el dueño de casa creció con los cambios. El Kelito prefirió no arriesgarse y realizó variantes defensivas para cuidar una victoria que hoy le permite celebrar la permanencia y alimenta su ilusión copera.