El hotel Guaraní, el más prestigioso de Asunción y que se había convertido en el símbolo de la ciudad en el pasado, reabrirá sus puertas en diciembre de este año como un albergue 5 estrellas tras haber permanecido por varios años cerrado debido a la grave crisis económica que había afectado en la década del ’90 al Instituto de Previsión Social (IPS).
La noticia fue anunciada por el presidente del IPS, Pedro Ferreira Estigarribia, luego de un encuentro con el presidente de la República, Nicanor Duarte Frutos.
La empresa concesionaria adjudicada para explotar el hotel se comprometió a invertir 5 millones de dólares en mejoras de su estructura edilicia y mobiliaria que permita al hotel alcanzar nuevamente un nivel competitivo en el microcentro de la capital.
Además, incorporará mobiliarios y equipamientos de vanguardia para la puesta en funcionamiento que ya genera expectativas positivas para el turismo y el mercado nacional, comentó el titular del ente previsional.
Ferreira informó que ya abonaron a la Municipalidad de Asunción 67 millones de guaraníes en concepto de tasas especiales e impuestos, con lo cual la empresa concesionaria ya cuenta con la aprobación requerida para ejecutar las refacciones y las innovaciones necesarias.
Los trabajos proyectados tienen plazo de terminación para el mes de diciembre de este año.
El consorcio adjudicado, de capital argentino, ya se encuentra realizando algunos trabajos preliminares con una inversión de 200.000 dólares, pero a partir de febrero comenzarán las demás tareas de remozamiento del Hotel Guaraní.
En el caso particular de este tradicional albergue, el IPS no realiza ningún tipo de inversión. Lo previsto es que la concesionaria invierta 5 millones de dólares, explicó Pedro Ferreira. Igualmente señaló que por la concesión efectuada en el mes de julio la institución recibirá un cheque en concepto de canon por más de 13.000 dólares.
Con relación al Hotel Acaray, que también es propiedad del IPS, Ferreira explicó que este establecimiento se encuentra en pleno proceso de adecuación por parte de la empresa ganadora de la licitación y que actualmente ya está pagando las tasas correspondientes.