“Esperamos que nuestra predicción es el 3,3%, aquí quizás (podría haber) un corte del 0,1 al 0,2% en el espacio porcentual en el crecimiento del 3,3% en 2020”, dijo Georgieva.
La jefa del FMI indicó que si el coronavirus de Wuhan (COVID-19) se contiene rápidamente, podría haber una caída brusca en la economía seguida de una “muy rápida recuperación”, lo que se conoce como una curva V.
INCERTIDUMBRE. Sin embargo, consideró que todavía es pronto para saber cuál será el impacto exacto del brote. “Estamos en un mundo con más incertidumbre, tenemos que aprender a construir más predictibilidad (...) La naturaleza del virus es desconocido al igual que cómo de rápido China puede contenerlo”, concluyó.
Las muertes por el COVID-19 siguen en aumento y ya suman 1.665 personas en China, tras añadirse este domingo 142 fallecidos al recuento oficial.
En contraste, los nuevos casos confirmados en el país asiático emprenden una tendencia a la baja: si bien la Comisión Nacional de Salud china anunció el viernes 5.090 nuevos casos y el sábado 2.641, en el último recuento de hoy esta cifra baja a 2.009 personas.
Emiratos Árabes Unidos ha contabilizado hasta la fecha ocho casos de coronavirus, entre ellos cuatro miembros de una familia china, si bien, al menos tres de ellos, se han recuperado ya.
La epidemia del nuevo coronavirus chino causó “una reducción potencial de entre 4.000 y 5.000 millones de dólares” de ingresos para las aerolíneas del mundo, anunció este jueves la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) en un comunicado.
PÉRDIDAS. Uno de los primeros sectores en sentir el impacto del coronavirus es el de la aviación. Según la agencia de Naciones Unidas “70 aerolíneas anularon todos los vuelos internacionales con destino y salida de China” y “otras 50 compañías aéreas redujeron sus actividades”.
Eso provocó una “reducción del 80% de la capacidad aérea extranjera para los viajeros con destino y procedentes de China, así como una reducción del 40% de la capacidad aérea de las aerolíneas chinas”, según estimaciones preliminares de la OACI.
El primer trimestre de 2020 experimentó una “reducción de entre 39 y 41% de la capacidad de los pasajeros, esto es, una disminución de entre 16,4 y 19,6 millones de pasajeros con respecto a las previsiones de las compañías aéreas”, precisó la organización.
El turismo asiático sufre
Con sus hoteles vacíos, las playas desiertas y anulaciones a granel, el Sudeste Asiático, particularmente dependiente del turismo, paga un alto precio por la epidemia del nuevo coronavirus con pérdidas evaluadas en varios miles de millones de dólares. La atmósfera es sombría en Pattaya, uno de los destinos favoritos de los chinos en Tailandia. En Camboya, incluso los famosos templos de Angkor se ven afectados, ya que la venta de billetes cayó entre 30 y 40%. La misma situación se corrobora en Vietnam: 13.000 habitaciones de hotel ya fueron canceladas en Hanói y las visitas a la joya del país, la Bahía de Halong, se desplomaron más del 60%.
Esta situación podría ser catastrófica para las economías de la región, muy dependientes del turismo. Mucha agencias de viaje y dueños de hoteles de la región proponen grandes ofertas y permiten a los clientes postergar su estadía sin gastos para atenuar las cancelaciones.
El organismo internacional anticipa una caída de 0,1 y 0,2% de la economía mundial debido a la epidemia del coronavirus. La aviación reporta pérdidas multimillonarias debido al virus.