Jesús exclama con dolor: ¿Con quién voy a comparar esta generación? Se parece a unos niños que se sientan en las plazas y les reprochan a sus compañeros: “Hemos tocado para vosotros la flauta, y no habéis bailado; hemos cantado lamentaciones y no habéis hecho duelo” (Mt 11,16-17).
El Maestro se sirve de aquel estribillo popular para quejarse por la respuesta que recibían sus palabras. Aquellas personas, representantes de la religiosidad judía del momento, tuvieron el privilegio de escuchar la buena nueva de labios del Hijo de Dios y, sin embargo, decidieron seguir igual como si nada hubiese pasado. Por el contrario, sabemos que muchos sencillos y humildes lo acogieron con fe. Por ese motivo, Jesús elevará más adelante su oración al Padre: “Yo te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has ocultado estas cosas a los sabios y prudentes y las has revelado a los pequeños” (Mt 11,25).
Durante el tiempo del Adviento el Señor nos invita a prepararnos para la celebración del nacimiento de Jesús. Podemos aprovechar para mirar con detenimiento nuestra vida, concretamente la manera en la cual acogemos los dones de Dios: ¿lo hacemos como los pequeños y sencillos, que escucharon la palabra de Dios y la pusieron en práctica? ¿O como aquellas autoridades convencidas de su sabiduría y que rechazaron la llamada de Jesucristo? Podemos pedir a Dios la docilidad necesaria para recibir sus dones.
“El Espíritu Santo es quien, con sus inspiraciones, va dando tono sobrenatural a nuestros pensamientos, deseos y obras.
Él es quien nos empuja a adherirnos a la doctrina de Cristo y a asimilarla con profundidad, quien nos da luz para tomar conciencia de nuestra vocación personal y fuerza para realizar todo lo que Dios espera.
Si somos dóciles al Espíritu Santo, la imagen de Cristo se irá formando cada vez más en nosotros e iremos así acercándonos cada día más a Dios Padre. “Los que son llevados por el Espíritu de Dios, esos son hijos de Dios” (Rm 8,14)”.
(Frases extractadas de https://opusdei.org/es-py/article/meditaciones-viernes-segunda-semana-adviento/)