A doce años de prisión fue condenado el acusado de haber incendiado a su novia. Se trata de Rigoberto Zelaya Villalba, quien está detenido por la muerte de Ana María Yoon Martínez. El hecho ocurrió el 18 de febrero del 2005, en una estación de servicio, ubicada en Lambaré.
El Tribunal entendió que el detenido actuó con dolo de primer grado “pues sabía que su novia estaba fumando y que estaba en un lugar de riesgo, como es una estación de servicio”, según la sentencia condenatoria.
Los jueces también advirtieron que durante el transcurso del proceso, la Fiscalía se limitó a acusar por homicidio simple y que ya al final, intentó cambiar la calificación, pidiendo que sea agravado.
El Tribunal entendió que al procesado no se le advirtió sobre la ampliación de cargos y que constituiría una grave violación al derecho de la defensa “para el caso de intentar llegar a una pena mayor, por lo que corresponde imponer una pena de 12 años de presidio”.
ANTECEDENTES . Hay que recordar que Rigoberto Zelaya y Ana María Yoon Martínez, antes de ocurrir el hecho, habrían estado en una discoteca, donde ya empezaron a discutir.
Posteriormente, la pareja se separó, pero luego de algunas horas volvieron a encontrarse en una estación de servicio en Lambaré. En el lugar citado nuevamente comenzó una breve discusión.
Ana María estaba a punto de subir a un rodado, cuando una amiga le pasó un cigarrillo. La ocasión fue aprovechada por Zelaya, quien le tiró encima un bidón lleno de nafta.
El procesado en todo momento quedó callado ayer y se mantuvo lejos de la prensa. Al final del juicio pidió perdón a los familiares de la víctima.
El abogado defensor Óscar Tuma (h) dijo que va a apelar la sentencia por considerar no ajustada a derecho. Argumentó: “Correspondía considerar que no hubo testigo contra mi cliente”.
Familiar afirmó no estar de acuerdo
La madre de la víctima dijo: “Si sabía que el Tribunal le iba a condenar a 12 años de prisión, hubiese hecho justicia por mano propia. Porque, yo perdí a mi hija que murió trágicamente y muy mal”.