Desde semanas atrás circula en las redes sociales y entre la población de Puerto Casado fotografías y audios relacionados a un supuesto grupo de guardias de seguridad fuertemente armados con armas largas como las que solamente se ven en regiones donde existen conflictos bélicos.
La revelación de los materiales audiovisuales ha levantado más aún la intranquilidad entre los pobladores del distrito de Puerto Casado.
De acuerdo a datos extraoficiales, los guardias de seguridad fueron contratados por una empresa que opera en la zona, con el propósito de resguardar las propiedades de aproximadamente 600.000 hectáreas. De hecho, a 101 kilómetros del casco urbano de Puerto Casado, se encuentra apostados sobre la ruta bioceánica, familias de campesinos, que son mencionados en un audio que se viraliza a través de las redes sociales.
En el archivo multimedia se puede escuchar claramente la conversación entre guardias de seguridad que mencionan, además del trabajo de custodiar la zona, que también hacen trabajos de inteligencia, como si fueran agentes de Investigación de Delitos.
De acuerdo a esta charla, realizan supuestamente relevamiento de datos sobre el lugar y de cada persona que habita Casado, además, sobre profesionales contratados para incursionar en el terreno; experimentados en conflictos armados en otros países.
Tomándose atribuciones y funciones que no les corresponden, y circulan por la zona, el temor es qué pasará si se cruzan con la población civil.
Todo esto ha generado la intranquilidad y un ambiente de zozobra en los pobladores de la tranquila localidad chaqueña. Llama la atención que la Policía no haya hecho nada para impedir la portación de armas largas inclusive, dentro de la ciudad.
Existen evidencias por la forma en que se exhiben los supuestos guardias que se evidencian en las fotografías; además, habiendo leyes que regula el uso de armas, que las autoridades no hayan tomado medidas al respecto.
EN SENADORES. Sobre el caso, miembros de la comisión de tierras dejaron un precedente ante la Cámara de Senadores, la incursión de grupos armados parapoliciales en la zona, que debe ser investigada, ya que está causando terror en la ciudadanía.
Esto sucede en medio de la lucha por la tierra que sostienen los habitantes de Casado desde que ingresó la Secta Moon en el lugar, que recientemente sufrió un revés tras la revocatoria de la colonización de hecho por el Indert.
Los campesinos que ocupan la parcela de tierra en zona de la bioceánica son otro grupo que también reclama tierra. En el mes de abril pasado un grupo de antimotines de la Policía Nacional intentó desalojar, pero sin éxito, a hombres, mujeres y niños del lugar.