“En estos 30 años no se produjeron muchos avances en los municipios, en lo relativo a descentralización y participación ciudadana. Si bien hay una heterogeneidad y algunos sí pudieron tener progresos importantes; la pandemia nos mostró una buena capacidad de gestión en algunos municipios como Encarnación, Villa Elisa, Ciudad del Este” sostiene Lilian Soto, experta en administración pública, ex concejala de Asunción.
Al analizar la descentralización como la capacidad municipal de ofrecer servicios, tampoco hubo una transferencia de competencias desde lo nacional a lo local, en temas claves como la educación o la gestión del agua, destaca.
“En el ámbito de salud, se avanzó un poco más con los Consejos Locales de Salud, aunque no se observa a simple vista una eficiencia importante de los mismos en todas partes, que no sea para pequeños parches en la salud pública. Y si bien varios municipios han contado con recursos extras de los royalties y el Fonacide, ha habido una dificultad muy importante a la hora del manejo honesto y transparente de esos fondos”, indica.
VERGONZOSO. “En términos de participación ciudadana, veo acciones aisladas, sin continuidad ni sistematicidad y un gran impacto de la cultura política prebendaria y clientelar a nivel local, en la mayoría de los municipios. Algunos, como el de Asunción, son vergonzosos, porque se propició esto desde el propio organismo que debería ser contralor del buen manejo, como es la Junta Municipal. Basta con mirar el repudiable reparto de cargos públicos a los concejales”, enfatiza Lilian.
Para la experta, existen varios aspectos para pensar en los municipios como instrumentos de la democracia. “Menciono solo algunos: descentralización efectiva con transferencias de competencias y recursos para brindar los servicios y garantizar derechos claves desde el ámbito local, estableciendo mecanismos efectivos de control ciudadano; transparencia plena de la administración municipal, instalación de la carrera del servicio civil en los municipios y erradicación de la discrecionalidad para el acceso a un puesto público”, afirma.