Un estudio elaborado por la consultora MF, del economista y ex ministro de Hacienda Manuel Ferreira, revela que la diferencia en los precios de productos básicos de la canasta familiar en Clorinda y Formosa oscila entre 25,6% y hasta 52,2% menos que en los supermercados locales.
Esta diferencia de precios es la que está empujando a que los paraguayos tengan mayores incentivos para hacer compras en las fronterizas ciudades de Formosa y Clorinda, debido principalmente a la devaluación en el tipo de cambio del peso argentino.
Ferreira dijo que si bien la asistencia crediticia que está brindando el Fondo Monetario Internacional (FMI) a la economía argentina podría ayudar a equilibrar el tipo de cambio del peso, dependerá mucho también de las expectativas de los agentes económicos para lograr consolidar ese objetivo.
“Si es que se mantiene una devaluación relativamente baja, creo que habrá incremento de la inflación porque estas devaluaciones se van a trasladar a los precios en la Argentina; va seguramente a llegar a impactar en el precio de los productos y conseguir equilibrar los precios relativos en frontera con Paraguay, pero esto va a tomar un tiempo relativamente largo”, adelantó.
Al ser consultado si el incremento habitual en el nivel de consumo que se da en los últimos meses del año podría mitigar en parte la merma en las ventas del sector comercial, respondió que podría tener algún impacto.
“En la medida en que Argentina o Brasil estén más baratos que el Paraguay, la caída con relación al año pasado va a ser todavía más grande. Esto es lo que hay que tratar de evitar, generando algún tipo de estímulo para el consumo a nivel local que permita compensar esta situación del diferencial de precio”, consideró.
COMERCIO FRONTERIZO. El mayor impacto generado por la devaluación, tanto del peso argentino como del real brasileño, lo están sintiendo los comercios ubicados en zonas de frontera.
En la reexportación o negocio de triangulación, los últimos datos del Banco Central del Paraguay muestran una caída acumulada al cierre de agosto de 7%, respecto al mismo periodo del año pasado.
De igual modo, se registra una merma del 6,3% en las ventas que se realizan bajo el régimen de turismo, debido a que el Paraguay actualmente es un país “caro” para los turistas de compra de los países vecinos.
“Por un lado, hay una reducción en la demanda agregada de argentinos y brasileños sobre el Paraguay porque se encareció relativamente; ese encarecimiento genera un segundo impacto, que hace que los paraguayos, en vez de comprar en el país, vayan al otro lado de la frontera. En la medida que se profundicen las diferencias cambiarias, que dependerán de la situación de Argentina y de la situación política del Brasil, esto se puede profundizar”, advirtió.
Estimular las promociones
Para el economista Manuel Ferreira, los operativos que pueda realizar la reactivada Unidad Anticontrabando no tendrían un efecto muy fuerte, dado que el fenómeno de compra en los vecinos países es más por un problema cambiario. “Lo que tendría que encararse es alguna dinamización importante de lo que es consumo a nivel local, con, por ejemplo, el regreso de las promociones que antes se veían y ahora no se están viendo, mientras no veamos cosas como esas tendremos poco impacto”, opinó.