“Es mucha emoción todavía haber vivido esto aquí en Paraguay, frente a tanta gente. Fuera de la medalla el haber competido con esa cantidad de gente y que se pararon para aplaudirme fue algo que realmente no esperé vivir y con la medalla de oro fue el broche de la noche”, comenta en el centro de prensa para Última Hora, la patinadora especialista en Solo Dance.
FORTALEZA MENTAL. “El primer día no te miento hubo muchos nervios. El deportista siempre tiene mucha presión y más para nosotros los paraguayos. A mí realmente me dio lo contrario; al principio fue guau un estadio lleno, pero trabajamos, tengo un equipo que me apoyó, mi técnico, mi sicólogo, pude lograr bastante bien todo”, dijo.
Érika es de Ciudad del Este. Desde los 5 años patina, ahora tiene 22, desde hace 3 años vive en Buenos Aires, donde estudia Ingeniería Civil.