30 abr. 2025

De la desesperación a la ira tras la tragedia en Brasil

Rescate. Equipos de bomberos recuperan los cuerpos de las víctimas de la rotura del dique.

Rescate. Equipos de bomberos recuperan los cuerpos de las víctimas de la rotura del dique.

El duelo por los cientos de personas que podrían haber muerto por el colapso de una represa el viernes en Brasil se convirtió rápidamente en furia, con las familias de las víctimas y políticos reclamando que la minera Vale y los reguladores no aprendieron nada de los últimos desastres.

Los bomberos del estado de Minas Gerais confirmaron ayer la muerte de 60 personas por la ruptura de una presa de relaves, que lanzó un torrente de lodo sobre las oficinas de la minera y el pueblo de Brumadinho. Cerca de 300 siguen desaparecidas, y funcionarios dijeron es poco probable que se encuentren sobrevivientes.

La fiscala general de Brasil, Raquel Dodge, dijo que la compañía debe responder por la tragedia y ser sometida a un proceso criminal. Los ejecutivos de la firma también podrían tener que asumir su responsabilidad de forma personal, señaló.

El presidente ejecutivo de Vale, Fabio Schvartsman, dijo que las instalaciones fueron construidas de acuerdo a las normas y que los equipos demostraron que la represa era estable 2 semanas antes.

El desastre en la mina Corrego do Feijao se produce menos de 4 años después del derrumbe de una presa en un yacimiento cercano manejado por Samarco Mineracao SA, empresa conjunta de Vale y BHP Billiton, donde murieron 19 personas y se vertió lodo tóxico a un río importante.

otros diques en alerta. Otros desastres como el Brumadinho ocurrirían en Brasil, teniendo en cuenta que casi el 10% de las 450 represas del estado de Minas Gerais carecen de condiciones de seguridad satisfactorias, advirtió Luiz Jardim Wanderley, especialista en minería de la Universidad del Estado de Río de Janeiro. “Probablemente tendremos otros casos, que podrían ser de una amplitud menor, pero también peores. En casi el 10% de los diques del estado de Minas Gerais (donde ocurrieron los 2 desastres) no se certificó la estabilidad o no hay suficiente información sobre seguridad. Así que se puede decir que una cantidad relativamente grande de presas con condiciones de seguridad inadecuadas permanecen en servicio en ese estado”, agregó.