Así, se aplicó la sanción ética de amonestación, en el Código de Ética de Funcionarios, para el director general de Administración y Finanzas, Rubén Ayala Olmedo, tras comprobarse que incumplió los deberes éticos de objetividad y decoro.
No se inhibió de estar en el Comité de Selección cuando su esposa María Flores de Ayala concursó para un cargo en el Poder Judicial. El caso lo denunció el ministro Alberto Martínez Simón, tras saber lo ocurrido por redes sociales.
LA JUEZA. Además, la jueza Nilda Giménez Bogarín fue sancionada con la amonestación debido a que incumplió los deberes de dignidad judicial, decoro e imagen judicial, institucionalidad judicial, tratamiento a jueces y funcionarios y la cortesía.
Esto, según la denuncia de las juezas Gloria Hermosa, Alba González y el Consejo de Superintendencia de la Corte porque utilizó los medios masivos de comunicación y redes sociales para “vilipendiar, injuriar, menoscabar y acusar de situaciones gravísimas a sus colegas” del Tribunal, de situaciones falsas, alega el fallo.
La jueza ya tuvo una llamada de atención de carácter privado y dos recomendaciones del Tribunal de Ética, por lo que ahora le aplicaron la máxima sanción.