Durante la tarde del viernes pasado, la jueza que lleva adelante el caso, María Eugenia Capuchetti, junto al fiscal Carlos Rívolo se acercaron hasta el domicilio de la vicepresidenta para tomarle declaración.
Fernández le dijo a la magistrada titular del Juzgado Criminal y Correccional Federal Nº 5 que no supo darse cuenta de lo que estaba pasando cuando le gatillaron dos veces contra su rostro, según informó el portal de noticias Infobae.
Además, relató que cuando aparece el arma de fuego, la vicepresidenta se agacha para buscar un libro que estaba autografiando a las personas que realizaban una vigilia en las cercanías de su hogar.
En las imágenes se puede apreciar el momento justo en el que un hombre de 35 años de nacionalidad brasileña empuña una pistola –marca Bersa, calibre 32 y apta para el disparo– y jala del gatillo dos veces, Fernández se agacha y para el momento en que se incorpora el sujeto es detenido por la custodia de la ex mandataria. El acusado prefirió guardar silencio y se negó a prestar declaración, mientras la policía ejecutaba un allanamiento en su domicilio.
Efectivos de la Policía Federal decomisaron 100 proyectiles calibre 9 mm en la casa del hombre, que residía en el municipio bonaerense de San Martín, situado en las inmediaciones de la capital. La investigación judicial continuará durante este fin de semana con peritajes del teléfono celular y una computadora portátil del detenido para averiguar si actuó en solitario.
Por otro lado, el abogado de la vicepresidenta, pedirá a la Justicia argentina que se califique el ataque del jueves como “intento de femicidio” en grado de tentativa por uso ilegal de arma de fuego.
“Estamos a la espera de que Cristina pueda tranquilizarse en relación con lo que le ha sucedido para poder pedir la calificación de intento de femicidio ante la Justicia”, dijo el abogado de la vicepresidenta, Gregorio Dalbón este sábado en declaraciones al canal de noticias C5N.
Para la defensa de Fernández, el hecho se trataría de un intento de feminicidio en tentativa, bajo los agravantes de alevosía al haber sido utilizada un arma de fuego. “Cristina estaba indefensa, ya que estuvo a 50 centímetros del arma”, agregó Dalbón.