La noche del miércoles, las defensas presentaron recursos ante la Oficina de Atención Permanente, y ayer llegaron a la Sala Penal.
Las defensas coincidieron en peticionar la extinción de la causa, la prescripción de los delitos, así como la nulidad de la sentencia de segunda instancia que ratificó el fallo dictado en el juicio oral y público.
Según las defensas, ya transcurrió el plazo de extinción del proceso. Hacen un recuento de todas las interrupciones, y señalan que pasaron exactamente 4 años y 352 días de duración de proceso, por lo que al no haber sentencia firme debe extinguirse.
Dicen que desde el 2013, son 7 años de proceso, por lo que la prescripción por el doble del plazo del delito. Finalmente, en la casación hablan de la nulidad de los fallos. Bogado fue condenado a un año de cárcel y Quintana a un año y medio. Las penas fueron suspendidas.