El presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Peter Maurer, confirmó ayer que esta entidad no participa en la operación humanitaria anunciada por el líder del Parlamento venezolano y presidente encargado, Juan Guaidó, quien ha dicho que esta llegará a la frontera con Colombia.
“En este momento nuestra ayuda es al Gobierno colombiano y a los de los países vecinos para que hagan frente al flujo migratorio”, aclaró el responsable de la organización. Sobre el riesgo de manipulación política de la ayuda humanitaria, sostuvo que se trata de una preocupación permanente para su organización, que promueve una asistencia neutral e imparcial a los necesitados.
“Eso significa ayudar en función de las necesidades y no de lealtades políticas a alguna de las partes en un conflicto”, explicó.
En ese sentido, Maurer agregó que su organización no trabaja directamente con actividades desarrolladas por el Gobierno de Nicolás Maduro ni por la oposición.
El aumento de las necesidades humanitarias en Venezuela llevó al CICR a duplicar el presupuesto que destina a este país, que ha pasado de 9 millones de dólares en 2018 a 18 millones este año. “Nuestro objetivo es aumentar el espacio humanitario en Venezuela porque creemos que hay necesidades enormes que no están cubiertas y para eso debemos aumentar nuestra labor”, comentó Maurer. EFE
