En la primera causa, que investiga la compra de los medicamentos oncológicos no autorizados, el Tribunal de Apelación en lo Penal, Tercera Sala, había anulado el arresto domiciliario concedido a Patricia Ferreira, presidenta de la firma, y a Nidia Godoy, directora de la empresa.
Pese a que la resolución salió hace más de una semana, la procesada Patricia Ferreira planteó, la semana pasada, un pedido de aclaratoria de la resolución.
Ayer fue la coprocesada Nidia Godoy quien presentó un pedido de aclaratoria. Con ello, una vez que sean resueltos los pedidos de aclaratoria recién el expediente podrá volver a primera instancia.
Ahí, se deberá determinar al nuevo juez que deberá citar de vuelta a ambas imputadas para la audiencia de imposición de medidas cautelares, ante la nulidad dictada por los camaristas.
OTRO CASO. La otra causa se encuentra en la Sala Penal de la Corte Suprema desde el pasado jueves, debido a que dos de los tres camaristas habían sido recusados por la defensa de Justo Ferreira.
Esto, en la investigación de la compra de insumos chinos a raíz de la pandemia del Covid-19. El expediente se había trabado cuando la defensa de Ferreira, a cargo del abogado Andrés Casati, recusó al juez José Agustín Delmás.
Después, el mismo Ferreira, bajo patrocinio de la abogada Andrea Escobar, ya en el Tribunal de Apelación recusó a los camaristas José Waldir Servín y Cristóbal Sánchez.
Estos dos camaristas habían intervenido en la primera causa contra la firma Imedic y fueron los que anularon el arresto domiciliario para Patricia Ferreira y Nidia Godoy.
Así, el expediente se encuentra actualmente en la Sala Penal de la Corte, donde los ministros Luis María Benítez Riera, Carolina Llanes y Manuel Ramírez Candia deberán resolver la recusación contra los camaristas.
Uno de los casos llegó al Jurado
La defensa del procesado Justo Ferreira había planteado una denuncia ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados en contra del juez de Garantías José Agustín Delmás, por mal desempeño en sus funciones. El mismo se inhibió del abogado Andrés Casati, actual defensor de Ferreira, pero en el mencionado caso, el mismo dictó una providencia en la que sostuvo que ya desaparecieron las causales de la inhibición. Con ello, tomó el caso Imedic y ahí fue donde lo recusaron y le denunciaron.
