Por Javier Núñez Ferreira
SIMÓN BOLÍVAR, CAAGUAZÚ
Un presunto abigeo falleció tras recibir un impacto de proyectil en el ojo izquierdo, efectuado por el capataz de la estancia Ganadera Domínguez, ubicada en la localidad de Simón Bolívar, departamento de Caaguazú. El empleado del establecimiento y su familia habrían sido atacados por dos sujetos que portaban cuchillos.
El fallecido fue identificado como Francisco Ramón Cáceres López, de 32 años, quien ya contaba con orden de captura por un supuesto hecho de abigeato, informó la Policía.
Según relató José Clinio González, capataz de la estancia, el sábado pasado salió del establecimiento, en compañía de su esposa e hijo, y regresó cerca de las seis de la tarde.
Cuando la mujer y el niño entraron a la casa del capataz, fueron atacados por un desconocido, que los amenazó con un cuchillo, indica el informe policial del hecho.
González escuchó los llamados de auxilio de su esposa y su hijo y acudió al lugar montado en un caballo. Otro sujeto lo interceptó y lo echó del animal.
Tras caer, González fue atacado por el malviviente con un machete. Este reaccionó y extrajo un revólver, que portaba en la cintura, y disparó contra su atacante. El agresor cayó al suelo sin signos de vida.
El otro sujeto, al escuchar el disparo, huyó del lugar. El capataz dio aviso a la comisaría jurisdiccional y, minutos más tarde, los agentes llegaron al establecimiento, donde encontraron tendido a Cáceres López.
DETENIDO. El capataz fue detenido y llevado a la Jefatura de Policía de Caaguazú, donde permanece recluido. La Policía ya tendría la identidad del otro abigeo que participó del intento de robo, revelaron fuentes de la investigación.
Según expresó el capataz a los investigadores de la Policía, sospecha que los delincuentes sabían que él y su familia estaban ausentes, y habrían aprovechado esto para ir a la estancia y sustraer ganado y algunos otros objetos de valor.
El caso ya está siendo investigado por el Ministerio Público y agentes de la Policía de la zona.
Los efectivos policiales no descartan que los delincuentes sean pobladores de las cercanías, debido a que sabían que González no iba a estar en la estancia.