Por Óscar Bogado
ENCARNACIÓN
Una funcionaria de la Entidad Binacional Yacyretá fue demorada ayer por el caso de las ventas irregulares de las viviendas del ente. La restricción se dio tras la declaración del principal sospechoso Iván Schurt, sindicado como el gestor de la comercialización irregular, que implicó a seis personas.
La investigada, quien ya fue imputada por presunta estafa, es Gladys Mercedes Recalde. Trabaja en el área de reasentamientos de la binacional. La orden de demora en su departamento con custodia policial fue adoptada por la fiscala Libia Centurión, tras la confesión del procesado.
ALLANAMIENTO. El operativo se hizo en el edificio Itapúa, departamento C1, donde vivía sola Recalde.
Se incautaron de varios elementos, como una computadora, chips de celulares, escáner, planos, una caja con documentos y otros.
La nueva procesada, en el momento del allanamiento, estaba en su departamento con Analía Garay y de su jefa Gloria Giménez, ambas también funcionarias de la Entidad Binacional.
Además, estuvieron por el lugar otros funcionarios de la EBY. Entre ellos, Alba Forcadel, subjefa de Reasentamientos de Yacyretá en Encarnación.
Otro que llegó fue Édgar Flores, esposo de otra funcionaria de la EBY, Rossy Durán.
LLAMATIVO. Desde la noche del lunes, efectivos de Investigaciones de la Policía Nacional custodiaban el departamento de Recalde, con orden de captura en mano.
Sin embargo, la orden no pudo ser ejecutada hasta las 10 de ayer martes, cuando la fiscala Centurión llegó con la orden de allanamiento firmada por la jueza Graciela Samudio.
Antes, varios funcionarios de la EBY llegaron al sitio. Algunos, como Analía Garay, salieron con una cartera llena de papeles en dos ocasiones. Luego, regresó. Después, la comitiva fiscal halló a Recalde y Garay sentadas desayunando como si nada hubiera ocurrido.
La negligencia en el allanamiento hace suponer que los involucrados tuvieron todo el tiempo para deshacerse de las evidencias con la ayuda de sus compañeros de trabajo y su propia jefa de área del ente.