La Policía Federal de Brasil detuvo en la madrugada de ayer a Assaad Ahmad Barakat (51), sindicado de ser principal financista de la organización islámica libanesa Hezbollah en América Latina y el Caribe, desde la Triple Frontera de Paraguay, Brasil y Argentina.
Según el abogado del libanés, Eduardo Lezcano, en comunicación con Radio Monumental 1080 AM, su cliente fue detenido frente a su domicilio en la ciudad brasileña de Foz de Yguazú.
Fuentes brasileñas, sin embargo, puntualizaron que Barakat se presentó a la Policía Federal para pedir refugio y fue detenido, ya que contaba con la orden de captura emitida en Paraguay.
La fiscala que lleva el caso y quien lo imputó por producción de documentos públicos de contenido falso, Irma Llano, pidió informes a la Interpol sobre la detención de Barakat. Pero al cierre de esta edición no había recibido aún ningún documento.
La agente fiscal mencionó que pedirá la extradición del libanés y estima que el trámite duraría alrededor de cuarenta días para que sea extraditado.
El abogado mencionó que era de público conocimiento la residencia de su cliente en Foz y que de lunes a viernes pasaba a Ciudad del Este para trabajar. “Él sabía que tenía orden de captura y yo le dije que no tenía garantías en Paraguay; pese a ello, tenía una vida normal”, dijo Lezcano.
PARAGUAYO. El detenido obtuvo carta de naturalización paraguaya en 1989, otorgada por la Corte Suprema de Justicia. Luego, en el 2007, la máxima instancia judicial le cesó la nacionalidad. Sin embargo, pese a que perdió la condición de ciudadano paraguayo, en abril de este año se le otorgó el pasaporte. El documento fue retirado de la oficina de Identificaciones de San Alberto, Alto Paraná.
Assaad Barakat es considerado por Estados Unidos como uno de los principales hombres del Hezbollah en América del Sur. Emanuele Ottolenghi, de la Fundación para la Defensa de la Democracia, tuiteó una foto de Barakat en la Mezquita de Foz, en el 2014, en la primera fila por celebraciones de Ashura. “A pesar de ser sancionado, claramente Barakat se sentía muy seguro”, decía el tuit.